En la era digital actual, un sitio web se ha vuelto esencial para cualquier empresa. Aunque la creación de sitios web se ha simplificado gracias a diversas herramientas, el proceso va más allá de simplemente estar en línea. Mi experiencia en el diseño web me llevó a entender que un sitio web es una ventana que revela la verdadera esencia de una empresa. En este blog, compartiré mi travesía al diseñar este sitio web, desde una perspectiva diferente, ya que no se trata de explicar una metodología si no de una experiencia que no solo implicó la creación de una página web, sino también la profunda comunicación de su pasión, creatividad y visión.
Asumí en un principio que sería un proyecto “normal” (aunque ninguno lo es), y por normal me refiero a que sería un proceso de diseño como anteriormente lo había trabajado, un par de reuniones, un par de pláticas, una propuesta, cambios, ajustes y listo, pero desde las primeras sesiones comencé a ver algo diferente, no se trataba solo de diseñar una página web, este proyecto iba mucho más allá del diseño. Cada reunión tenía algo nuevo por descubrir, no querían un sitio web solo por el hecho de tenerlo, querían plasmar su pasión por la arquitectura, su disciplina, su creatividad, resaltar la importancia de la arquitectura en la sociedad, su trayectoria, su continuidad.
Despacio que llevo prisa… Desde que escuche está frase del arquitecto Gerardo Aguirre, mi manera de abordar un proyecto cambió, comprendí que no se trata de echarte a la hamaca e ir despacio por que el cliente tiene todo el tiempo del mundo. ¡No!, es darte el tiempo para no perder de vista los detalles, los detalles son importantes, son los que hacen la diferencia. Y este proyecto me dió la libertad para prestar atención a los detalles, esos detalles que muchas veces son olvidados. Sin duda crear un sitio web tiene un grado de dificultad, pero diseñar un sitio web para un amante del diseño como lo son los arquitectos, es un reto.
Diseñar un sitio web va más allá de la estética superficial; En cada reunión, en cada ajustes, en cada plática, encontré la oportunidad de transmitir no solo la esencia del despacho, sino también mi pasión como diseñador gráfico. Este proyecto me enseñó que un sitio web bien diseñado y funcional, no es una casualidad, donde cada interacción con el sitio web es una oportunidad para cautivar a los expectadores. Espero que mi experiencia inspire a otros diseñadores a abrazar el desafío de no solo diseñar por diseñar, si no de conocer a tu cliente que seas capaz de transmitir su propio lenguaje de manera visual.
